Por las tierras de Curacaví (piedra del festín) y María Pinto llegaron a la zona de la actual Melipilla, tribus provenientes de la Cultura Aconcagua Salmón. Orillando el estero Puangue estos indígenas avanzados en agricultura y alfarería fueron adentrándose hasta asentarse a los pies del Cerro Redondo. Al no contar con suficiente agua, construyeron un canal de regadío de 17 kilómetros de largo, para conducir y aprovechar las aguas de los ríos Mapocho y Maipo.